El intercambio hace que las personas adquieran nuevos hábitos, cambien prioridades y hagan nuevas elecciones. Este aspecto se relaciona con todo, incluso alimentación. Por lo tanto, hay que tener cuidado Y poner atención al colesterol durante el intercambio para que puedas continuar con el cuidado de tu salud.

Al llegar a un nuevo país el intercambista se da cuenta de que casi todas las costumbres que poseía en casa serán sustituidas por otros. Sea porque la rutina es bastante diferente, o la voluntad de experimentar cosas nuevas es la prioridad. Los malos hábitos adquiridos durante el intercambio pueden perjudicar la salud del estudiante. A continuación, te damos algunos consejos de cómo mantener la salud al día, ¡echa un vistazo!

NO DEJES QUE LA DIFICULTAD DEL IDIOMA OBSTACULICE TU ALIMENTACIÓN

Entender el menú y pedir un determinado plato puede ser difícil, si el intercambiador aún no posee cierto nivel de conocimiento del inglés. Esta barrera hace que los estudiantes terminen entregándose a la comida rápida y comida de la calle, que suelen ser similares en todo el mundo. Sin embargo, no hay como hacer de ese tipo de alimentación una rutina. El exceso puede llevar al aumento del colesterol y desencadenar otras enfermedades, como la obesidad y la diabetes.

PLATOS DIFERENTES EN MOMENTOS ESPECIALES

La voluntad de experimentar lo nuevo o la dificultad de adaptación a la alimentación local puede llevar al nuevo estudiante a hacer elecciones equivocadas. El desayuno típico de Irlanda es delicioso, con salchichas, tocino, chorizo, huevos, frijoles dulces y pan tostado. Sin embargo, la ingesta diaria puede hacer mal para aquellos que no están acostumbrados a tanta grasa al comienzo del día. Por eso, es importante dejar este plato típico para “momentos especiales”, como la curar de una resaca. Opta por el porridge, hecho con maíz, avena o quinoa, acompañado de frutas.

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LA PRACTICIDAD NO SIEMPRE ES BUENA

Las papas son la base de la mayoría de los platos típicos de Irlanda. Así como salchichas y otros embutidos. Es práctico ir a un restaurante o una cafetería y consumir esas maravillas. El cuerpo pasa entonces a manifestar falta de energía, sueño excesivo, piel grasa, caída de cabello y alteraciones del peso y del colesterol. Es importante que el intercambiador tenga siempre en la mochila una fruta, yogurt o vegetales para hacer pequeños bocadillos entre los compromisos de la rutina. Mercados y tiendas de comestibles esparcidos por las calles de Dublín ofrecen excelentes opciones, basta con buscar.

NO DEJES QUE EL CLIMA FRÍO TE DESANIME

Incluso los alumnos que son activos, acaban desanimándose de hacer ejercicios cuando están expuestos al clima de Irlanda. El viento, la lluvia y el frío dificultan el mantenimiento de la rutina. El estudiante necesita adaptarse al clima y hacer prevalecer su fuerza de voluntad frente a las intemperies. Dublín es una ciudad plana, que invita a los deportes y fomenta el uso de la bicicleta en lugar del transporte público, a través de Bicicletas Dublín, por ejemplo. Excelente oportunidad para el alumno que desea mantener una rutina activa, yendo a sus clases y compromisos en bicicleta.

Los malos hábitos existen en todas partes del mundo. Igualmente, hay la posibilidad de hacer elecciones equilibradas a la hora de alimentarse y ejercitarse. El ialumno que tiene esa conciencia y cuida su salud, aprovecha mucho más todas las oportunidades de adquirir aprendizaje y nuevas experiencias. ¡Piensa sobre eso!